El Banco Santander comunicó este jueves el plan con el que compensará a parte de los accionistas particulares que sufrieron la pérdida de todos sus ahorros invertidos en acciones por la quiebra del Banco Popular. Los afectados recibirán un bono por el 100% de la inversión al 1% durante siete años mediante un sistema que tiene letra pequeña y que deberán leer con cuidado para decidir si aceptan esta propuesta u optan por emprender medidas legales contra las entidades presididas por Ana Botín y Rodrigo Echenique, respectivamente.
El Santander que ha definido como «acción de comercialización» —para evitar ser interpretada desde el punto de vista jurídico como una compensación legal— la cual consiste en entregar de forma gratuita obligaciones perpetuas contingentemente amortizables del Santander de 100 euros de valor nominal. Es decir, bonos que en el momento de la emisión —previsiblemente en septiembre— tendrán un valor de 100 euros, pero que rápidamente se ajustarán al valor real de mercado, posiblemente inferior por las primeras ventas. Estos valores ofrecerán una remuneración en efectivo pagadera trimestralmente del 1% sobre el valor nominal hasta el séptimo año de la inversión.
Pero aquí está la trampa en esa letra pequeña que hay que leer detenidamente, pues, sólo recibirán esta compensación los ahorradores más fieles que suscribieron las acciones en la ampliación de capital de 2016 y que las mantuvieron hasta el mismo día de la resolución por parte de las autoridades europeas, el pasado 6 de junio. Lo mismo se aplica a las obligaciones subordinadas convertibles. Si las vendieron en los días previos debido al pánico que se extendió por el mercado por el desplome de la cotización y de los bonos, no tendrán derecho a recibir nada.
Además, otro elemento crucial es que los que acepten la propuesta del Santander deben saber que renuncian para siempre a emprender cualquier acción legal contra el banco, que Negotia valoraremos si dicha renuncia es acorde a la Ley.
También han quedado fuera de esta compensación los potenciales beneficiaros los llamados inversores profesionales, los que comprasen acciones o deuda subordinada por más de un millón de euros. Un colectivo muy grande porque Popular animó a muchos de estos clientes institucionales que tenían créditos con el banco a suscribir la ampliación de capital con líneas de financiación concedidas por la propia entidad financiera.
Así, los inversores que cumplan los requisitos establecidos por el Santander sólo recibirán el importe abonado durante la última ampliación de capital, sin ninguna compensación por los títulos comprados anteriormente.
Desde Negotia, despacho especialista en derecho Bancario, y con el prácticamente 100% de éxito en las reclamaciones de preferentes, subordinadas, multidivisas, clausulas suelos,…, te asesoramos a través de profesionales para que recobres la totalidad de todos tus ahorros que tanto esfuerzo te ha costado mantenerles.
Ponte en contacto con nosotros, en el teléfono 689 93 33 27